Translator

martes, 29 de noviembre de 2011

Confesión indirecta

Ojala supieras todo lo que siento, no tienes ni idea la rabia que me da no poder decirlo abiertamente.
Puede que suene cursi, o un poco estúpido...
Pero si pudiese mirarte a la cara y liberar todos estos pensamientos, te diría que me haces sentir algo nuevo, que es muy bueno y a la vez muy malo.
Que te pienso mil veces al día, porque cada cosa que hago sería mejor si tu estuvieras a mi lado.
Que me encantaría hacerte inmensamente feliz, porque egoistamente también me haría feliz a mi.
Que sueño con conocer cada lunar de tu cuerpo.
Que me hipnotizas cuando hablas, y lo siento, porque el 90% de las veces no puedo escuchar lo que dices, y es que no puedo dejar de pensar como sería tenerte más cerca.
Que mirarte es observar el pecado en estado puro, deseando que tus manos se deslicen por mi espalda, y me abraces hasta que duela.
Que por desgracia me conformo con mirarte e imaginar lo genial que sería ser tuya...
No se si quiero alejarme de ti, porque quizá lo más inteligente por mi parte sería olvidarte, pero mi corazón me dice que eso no es justo.
Tampoco creo que lo sea para ti, porque nadie te hará tan feliz como yo.
Tenerte tan cerca y a la vez tan lejos es una tortura...
Solo digo que me gustaría hacerte un regalo, pero no es de manera desinteresada.
Te regalo mi alma, a cambio solo te pido que estés conmigo.


No hay comentarios:

Publicar un comentario